El espejo estropeado

Es una historia de un niño que es rico y que tiene prácticamente todo lo que quiere, pero lo que más le gustaba eran las cosas raras. Un día encontró un espejo con un anciano misterioso y le rogo a sus padres que se lo compraran. Al llegar a su casa, quiso mirarse al espejo y al ver el reflejo vio que su cara era triste, intento sonreír y hacer muecas pero se seguía viendo triste, fue a comprarse dulces y llego contento a verse en el espejo pero seguía viendo triste, y se dijo: ‘’Nunca había visto un espejo estropeado’’ y decidió abandonarlo en una esquina de su habitación. Salió de su casa para ir a comprarse más juguetes, pero al llegar al parque vio a un chico llorando, al preguntarle qué es lo que le sucedía le dijo que perdió a sus padres y no los encontraba, el niño decidió ayudarlo, el chico no dejaba de llorar y el niño decidió comprarle dulces para animarlo, y después de caminar demasiado los encontraron preocupados por el chico, se despidió y se fue, el niño al darse cuenta de que ya era tarde y no le quedaba dinero por comprarle dulces al chico, decidió regresar a su casa, al entrar a su habitación comenzó a ver un deslumbrante brillo que iluminaba toda la habitación, era el espejo que abandono.
Al reflejarse en el ya no veía la misma cara triste de siempre, sino ahora veía una cara completamente feliz, y entendió el verdadero misterio del espejo, la verdadera alegría llega al ayudar a otros.
Cada mañana al despertar, se reflejaba en el espejo y veía la cara triste, pero ahora ya sabía cómo recuperarla, ayudar a otros.

Ayudar a los demás produce la alegría más verdadera.
Valor que nos enseña: Bondad y Generosidad.

 Por: Julieta Noriega Rodriguez.